Visita invernal al Jardín de la Granja de San Ildefonso (Segovia) el 11 de Febrero

Nuestras colaboradoras Ana Spalla (paisajista, interiorista) y Marta Gallego (arquitecto superior, paisajista) nos proponen una actividad diferente para el proximo 11 de febrero:

Todos hemos oído mil veces, que los Jardines de la Granja de San Ildefonso, son una copia de Versalles “a la española”, pero en realidad son mucho más, nos cuentan la historia de un Rey tímido y solitario, educado en la Francia de Luis XIV, obligado a gobernar un país que desconocía, y que, en cuanto tuvo ocasión, se hizo un refugio, en la montaña, para desaparecer y pasar largas temporadas, con Farinelli amenizando sus estancias.

Esta es la historia que nos cuentan los jardines de la Granja, cargados de simbología y mitología, en un emplazamiento impresionante, y con un respeto a la Naturaleza nada usual para la época.
Si os apetece, os propongo acompañarme a dar un paseo por este jardín, agudizando bien todos los sentidos, ya que si estamos atentos, oiremos todas las historias mágicas que este lugar nos puede contar.
Se trata de una actvidad apta para todos, no necesitándose ningún requisito especial, salvo una condición física básica.
Duración de la actividad 6-7 horas (DÍA COMPLETO).

DESARROLLO DEL RECORRIDO

La Granja, es un lugar mágico, cuanto más en invierno, momento en el que sólo los verdaderos apasionados de los jardines, se abrigan y se deciden a recorrerlo.
En invierno, no pueden distraernos las hojas ni las flores, podemos estudiar perfectamente la compleja estructura de este jardín, e intentar comprender la historia que nos cuenta, ya que todos los jardines, tienen una historia que contar.
Se trata de un jardín atípico, con dos ejes longitudinales de desarrollo, esto denota un respeto hacia el paisaje existente (no se querían realizar excesivos movimientos de tierras), nada usual en los jardines del tipo clasicista francés.

Estos dos ejes longitudinales, así como los ejes secundarios transversales, marcarán nuestros recorridos.
Realizaremos el primer recorrido, partiendo de palacio, a través del eje principal de la composición (centrado con el palacio) desde la cota más baja hasta la zona más alta y desconocida de este lugar, donde se encuentra “El Mar”, un gigantesco estanque, alimentado por el deshielo, y que permitía que las fuentes del jardín funcionasen por gravedad. En esta zona, además se encuentran las intervenciones más recientes del jardín, como son los “caprichos” o “folías”, propias del jardín rococó del siglo XVIII). A lo largo del recorrido se irán explicando las distintas zonas que se van insertando en este eje de composición.
La vuelta, la realizaremos por el segundo eje de composición, no coincidente con el centro de gravedad del jardín, pero no por ello menos importante, este eje, coincide casi en su totalidad con la “Fuente de Neptuno”, la más espectacular y conocida del jardín. Posteriormente, nos dirigiremos a la zona Este del jardín, donde se encuentra “El laberinto”, uno de los pocos laberintos barrocos que existen, realizado en Carpe, allí jugaremos a perdernos y a encontrarnos, ya que, la búsqueda de uno mismo, era la función de este artificio.
Una vez logremos escapar del Minotauro, nos dirigiremos a la zona Oeste del lugar, visitaremos el grupo de bosquetes denominado”El Ochavo”, donde se encuentran la zona con más carga mitológica y de simbología. Ocho caminos, van enlazanzo plazoletas y fuentes, que, en realidad son ocho capítulos de una misma historia.
La última zona que se recorrerá, es la más cercana al palacio, “El Parterre”, y “El Mallo”, “El Potager”…, lugares que poca gente conoce, y que no voy a desvelar en esta explicación, tendreis que venir a verlo.
Marta Gallego.